La Cueva de los Verdes está situada en el norte de
la Isla de Lanzarote, en el municipio de Haría, e integrada en el vasto paisaje
volcánico del Monumento Natural del Malpaís de La Corona.
Su formación es el resultado de la actividad
eruptiva del Volcán de la Corona (datada según los geólogos hace
aproximadamente 3000 - 5000 años), que dio lugar a un extenso túnel volcánico
subterráneo de más de seis kilómetros de longitud que discurre desde el cono
volcánico hasta el mar. Dos de los Centros de Arte, Cultura y Turismo más
relevantes, la "Cueva de los Verdes" y los "Jameos del
Agua".se encuentran integrados en el interior de este túnel.
Un túnel volcánico se produce por el enfriamiento y
solidificación de la parte superficial de una colada lávica en contacto con el
aire mientras el magma fundido del interior continúa fluyendo. El
desprendimiento parcial del techo de una sección de este túnel forma la
estructura denominada "Jameo", que no es más que la abertura o boca
del terreno que permite el acceso a las diferentes grutas.
El túnel formado por el Volcán de la Corona es uno
de los más extensos e interesantes del planeta. A lo largo de su recorrido,
existen al menos dieciséis Jameos. Los más de seis kilómetros conocidos se
prologan desde el cráter del volcán hasta que se adentra en el mar en un tramo
submarino de un kilómetro y medios denominado "Túnel de la Atlántida"
Notas históricas
Los primeros testimonios que tenemos sobre la
existencia de la Cueva de los Verdes provienen de los escritos del ingeniero
militar italiano Leonardo Torriani en 1590. En ellos Torriani, aparte de
destacar la significativa belleza de este llamativo accidente geológico,
aprecia un importante interés defensivo y de protección para la población
insular.
§ "? y en su interior tiene antros maravillosos,
que parecen hechos por mano maestra, y con parajes ásperos y difíciles que no
se pueden franquear sin luz. Algunos conocedores dicen que dentro tiene un río
secreto, que corre con gran ímpetu y que muy pocos conocen. También tiene otra
salida, que responde al mar, por la cual los hombres y las mujeres que se
amparan allí, pueden salir y embarcar.Descripción de las Islas
Canarias. Leonardo Torriani, 1590.
Lanzarote, principalmente durante los siglos XVI y
XVII; sufría cíclicos episodios de enorme inseguridad debido a las continuas
invasiones, razzias, y secuestros por parte de los piratas de la costa norte de
África. Se tienen evidencias históricas de que las intrincadas galerías de la
Cueva de los Verdes sirvieron como escondite y refugio a la diezmada población
insular.
Destacan algunas invasiones a gran escala como las
de Tabán Arraez y Solimán en 1618 que alcanzan dimensiones verdaderamente
catastróficas. El historiador Viera y Clavijo (Noticias de la Historia General
de las Islas Canarias, 1772-1773) relata así las funestas consecuencias de esta
incursión "?la porción más considerable del vecindario se refugió en los
escondrijos de las cavernas, señaladamente en la gran cueva de los Verdes de
Haría, que corre bajo tierra casi tres millas a lo largo. (?) Este funesto
golpe, que dejó atónita y bañada en lágrimas toda la tierra de Lanzarote,
sirvió también para empobrecer el país extrayéndole la más pura
sustancia?"
Con posterioridad, ya en el siglo XIX, se convierte
en visita obligada para viajeros, eruditos y científicos europeos que se
desplazaban por las Islas Canarias. Todos ellos describen con fascinación esta
singular formación volcánica. Podemos citar al geólogo Georg Hartung (1855), al
geólogo y botánico Karl Von Fritsch (1863) y, más recientemente, al también
geólogo Eduardo Hernández-Pacheco (1907).
La intervención interior
Concientes de los singulares valores estéticos, geológicos
e históricos de la Cueva, en los años 60 del siglo XX, se plantea su
acondicionamiento para su uso turístico.
§ La creación del Centro de Arte, Cultura y Turismo
de "Cueva de los Verdes" forma parte de un conjunto de actuaciones
innovadoras en lugares estratégicos promovidas por el Cabildo de Lanzarote
destinadas a potenciar el atractivo turístico de la isla. Su inauguración en
febrero de 1964 constituye una de las primeras apuestas decididas por
incorporar a la isla dentro de los destinos turísticos de calidad.
Se cuenta para este ambicioso proyecto con el
artista lanzaroteño Jesús Soto. A él debemos tanto la iluminación como la
creación del recorrido interior. El espacio interior apenas si fue intervenido,
siendo la explanada de acceso exterior y el sendero interior en donde se
realizaran las actuaciones más significativas. A pesar de lo espectacular del
resultado, la intervención artística, muy respetuosa con el entorno, se limita
a introducir la luz, perfectamente mimetizada y el sonido ambiental.
§ Jesús Soto, observador atento e inquieto, despliega
todo su conocimiento sobre la luz y la sombra, investigando meticulosamente la
forma adecuada de iluminar y realzar los relieves y las texturas que tapizan
las espectaculares bóvedas multicolores del interior de la Cueva. Soto crea una
atmósfera cromática de espacios y entornos artístico-naturales de una belleza
extraña y poética. La Cueva de los Verdes se inaugura en febrero del año 1964.
Desde entonces numerosos visitantes han podido disfrutar de este sobrecogedor
fenómeno natural que se ha convertido en uno de los lugares más sugerentes de
Lanzarote.
Otro de los nombres que aparece íntimamente ligado
a la génesis de este Centro de Arte, Cultura y Turismo es el historiador
Lanzaroteño Agustín de la Hoz, que en 1964 publica su obra literaria
"Cueva de los Verdes" donde, con posterioridad a una exhaustiva
investigación, y con tono poético describe concienzudamente la gruta. A su vez
interpreta los distintos segmentos de la cueva introduciendo nombres del imaginario
histórico insular.
El recorrido
El tramo visitable de la Cueva de los Verdes está
formado por un kilómetro de galerías superpuestas con interconexiones
verticales entre ellas. En algunos puntos llega a tener tres niveles y permiten
al visitante descubrir nuevos espacios desde perspectivas diferentes.
El interior del túnel llega a tener unos cincuenta
metros de altura con anchuras que se aproximan a los quince metros. Existen
peculiares formaciones y estructuras pétreas: canales de lava, bloques sólidos
arrastrados por la corriente, goterones de lava, depósitos salinos, sucesivos
estratos de lava solidificada?
Resulta particularmente espectacular la gama de
colores que adornan las bóvedas y paredes de la gruta. Los colores rojizos son
debidos a la oxidación del contenido en hierro de los basaltos. Las múltiples
tonalidades ocres provienen de los reflejos de la luz sobre eflorescencias
salinas producidas por las filtraciones de agua desde la superficie.
Llama la atención el agradable clima del interior.
Las corrientes de aire permiten una ventilación natural suave y agradable y la
temperatura, constante, se sitúa en torno a los diecinueve grados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario